Ocho meses

Si antes balbuceaba “mamama” o “papapa” sin mayor sentido, es posible que ahora sí lo tenga. Igualmente, ya demostrará memoria del tiempo y, probablemente, recuerde algunas de sus acciones pasadas. Le encanta ver como desaparecen y aparecen objetos, así como personas. Por eso, disfruta ver caer los juguetes o jugar al escondite con sus papás. Debido a que ya comprende el significado de un “NO”, es bueno comenzar a utilizarlo para indicarle sus límites y trabajar la disciplina. Sin embargo, es importante no abusar de este recurso y mantenerse siempre constante con las reglas, sin contradicciones a futuro que lo confundan.

Alimentación

Su horario es cada vez más parecido al tuyo. Podrá hacer tres comidas principales, complementando con dos meriendas. Es posible que quiera tomar la cuchara o llevarse los alimentos a la boca por sí solo, como símbolo de su interés por ser autónomo. También, es común en esta etapa que los papás le quieran dar a probar de todo lo que comen, en trocitos pequeños. Esto puede permitirse, siempre y cuando no sean alimentos condimentados, duros o riesgosos para su salud.

Desarrollo físico

  • Puede gatear hacia adelante y hacia atrás
  • Se puede sentar y cambiarse a posición de gateo sin apoyo
  • Da vueltas sobre su barriga impulsándose con los pies

Desarrollo sensorial y motor

  • Puede aplaudir y decir adiós con sus manitos
  • Se observa constantemente las manos en sus diferentes posiciones
  • Examina los objetos con detenimiento y noción de tridimensionalidad
  • Puede jugar solo, deteniéndose a explorar cada juguete con sus manos, boca y oídos

Sugerencias para los padres

  • Les encanta jugar al escondite. Desaparece y aparece repentinamente para que mueran de la risa
  • Disfrutará jugando con las tapas, cucharas y potes de la cocina, siempre que sean de plástico, madera o acero, para evitar accidentes
  • Despídete con la mano, cada vez que te distancies, y pronto aprenderá a hacerlo