Ya tu bebé es más personita y comienza a expresarse con más espontaneidad. Reconoce, sonríe, emite sonidos emotivos, fija la mirada, puede mantener su cuerpo y cabeza erguida. Incluso, si lo colocas de lado, podrá voltearse; por lo que deberás tener mayor cuidado al dejarlo sobre su cambiador o cualquier superficie elevada. Te darás cuenta cómo pasa el tiempo de rápido, y cómo muy pronto perderá sus primeros monitos o vestidos. Probablemente, sus nuevos horarios de sueño un poco más extensos te dejen dormir más de noche, así que tus energías se estarán activando nuevamente, y podrás reincorporarte poco a poco a tus oficios regulares. Aprovecha los primeros meses de tu bebé, pues definitivamente son únicos.
Alimentación
Todavía no se recomiendan alimentos sólidos en su dieta. Su número de comidas puede disminuir a 5 tomas de leche por día, de hasta 6 onzas cada una. Sólo si la leche materna no le satisface o si se detiene el aumento debido de peso, deberás comenzar a completar con leche de fórmula, siguiendo las direcciones de su pediatra.
Desarrollo físico
- Puede voltearse de la barriga hacia la espalda
- Mueve con más energías las piernas y los brazos
- Intenta agarrar objetos y mantiene las manitos abiertas con frecuencia
Desarrollo sensorial y motor
- Demuestra preferencia por los colores vivos y brillantes
- Sigue con la vista el movimiento de objetos
Desarrollo social
- Su llanto es más específico, por lo que se podrán interpretar más fácilmente sus necesidades
- Se queja cuando lo dejan solo y se emociona ante la presencia de personas
Sugerencias para los padres
- Evita las siestas largas después de las cuatro de la tarde, para que puede conciliar un sueño más profundo durante la noche
- Cántale, convérsale e imita sus sonidos, para estimular sus comunicaciones y vocalizaciones